Administración financiera
Hasta hace poco era de las que corrían el día 14 de cada mes a la tienda de conveniencia más cercana para pagar la luz, el día 18 para que no me cortaran el agua y el 26 para mantener mi línea en el celular. Sabía perfecto que podía realizar la domiciliación de los pagos y ahorrarme esa adrenalina, pero por razones desconocidas (desidia) nunca lo hice y así me quedé más de una vez sin luz, sin bañarme o sin whatsapp.
Seguramente estás leyendo esto porque tú tampoco sabes muy bien cómo hacerlo y si te conviene o no, así que en este artículo responderé las 4 preguntas principales sobre la domiciliación.
Empiezo diciéndote que la domiciliación es una forma de pago en la cuál le pides a tu banco que realice pagos por cierta cantidad a determinada entidad en días que tú estableces. Es decir, tú le dices al banco cuándo, cuánto y a quién pagarle.
Es muy fácil, tienes tres opciones:
¡NADA! domiciliar tus pagos no sólo es muy fácil y conveniente, además es gratis.
En Resuelve tu Deuda, por ejemplo, domiciliar tus aportaciones te ayuda a que mes a mes cumplas con tu parte del programa, es decir, a siempre hacer tus pagos en tiempo y forma para no retrasar la liquidación de tus deudas. Solicitarlo es súper sencillo: comunícate con Servicio al Cliente, pide tu domiciliación, firma la carta que el asesor te enviará y listo! un pago menos del cuál preocuparte.
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