Finanzas personales
La inteligencia financiera es la capacidad que tienen las personas para estudiar, analizar y comparar oportunidades de inversión que permita desarrollar y optimizar las fuentes de ingreso. Se podría resumir como las habilidades para resolver problemas o conflictos relacionados con el dinero.
Los expertos identifican tres pilares de la inteligencia financiera:
Una de las ventajas de desarrollar la inteligencia financiera es que mejoran las finanzas personales y también se gestionan o invertir mejor los ahorros para obtener mayor rentabilidad.
La inteligencia financiera consiste en destinar los ingresos al ahorro, pero también hacer que esos recursos crezcan, pues la idea de invertir es poner a “trabajar” el dinero y utilizar los intereses a favor de quien invirtió.
No es necesario ser un gran inversionista para aprender algunas estrategias que faciliten el entendimiento y gestión de nuestras finanzas personales.
Comenzar a pensar como un financiero es sencillo. Hay que empezar por lo básico:
Esto te permitirá comenzar a identificar herramientas que podrían ser de utilidad para tu contexto y tus condiciones económicas. También te hará más sencillo tomar decisiones personales para cuidar tus ingresos y destinar recursos a una posible inversión, sin afectar tus ahorros.
El ideal de los cerebros financieros es no depender de un empleo. Llegar a ese escenario implica varios pasos previos que aquí enlistamos:
La inteligencia financiera es el conjunto de habilidades necesarias para resolver problemas financieros, además de tener la capacidad de aumentar los ingresos y/o disminuir los gastos. Pero cuando no lo logramos es porque estamos incurriendo en algún error. Acá los más comunes:
Si las cosas se salieron de las manos, tampoco es el fin del mundo. Solo hay que reorientar los esfuerzos y aprender de los errores. Actualmente, existen asesores especializados como las reparadoras de deuda que han logrado rehabilitar financieramente a quienes perdieron el control de sus finanzas.
Las reparadoras de crédito se han convertido en instituciones que proporcionan educación financiera a sus clientes. Son empresas que ofrecen servicios de negociación de deudas que ya tienen una marca negativa en el Buró de Crédito. Diseñan planes de ahorro a la medida que permiten saldar la mora en un tiempo que sea cómodo para el pagador.
Aprender a ahorrar y cumplir con un compromiso financiero convierte a las personas en usuarios responsables de los productos crediticios, lo que favorece a los otorgantes de crédito y también beneficia a quienes podrán volver a ser solicitantes de servicios y productos de la banca. Los deudores rehabilitados incluso serán mejores pagadores y no volverán a caer en una situación de sobreendeudamiento o de impago.
Tocar fondo te permite pensar las cosas de una manera distinta y también es la oportunidad para mirar otros horizontes. Así que si estás pasando por una mala racha, si tomas las medidas necesarias para salir del bache, podrás pensar mejor tu futuro económico echando mano de las herramientas que te ofrece la inteligencia financiera.
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