Negocios y finanzas
Estás buscando recursos para financiar tu proyecto de negocio, pero no quieres recurrir a la tarjeta de crédito para evitar endeudarte. Bien pensado. No conviene contraer una deuda, cuando aún tienes incertidumbre sobre cómo la pagarás.
En México, las esperanza de vida de los negocios se mide con una encuesta del INEGI que calcula que de cada 100 emprendimientos que nacen por año, 33 morirán. Esa misma estadística calcula que de cada 100 empresas, 65 morirán antes de cumplir cinco años.
La Asociación de Emprendedores de México calcula que el fracaso de un emprendedor le costará aproximadamente 40 mil pesos, entre gastos notariales y administrativos para cerrar formalmente ese negocio que no funcionó.
Aunque existen créditos diseñados para incentivar el autoempleo, la innovación y el desarrollo tecnológico a través de emprendimientos de micro empresas, habrá quienes no los conozcan y caigan en la tentación de echar mano del crédito tradicional para financiar sus sueños de negocio. Pero qué pasa cuando ese restaurante o esa cafetería no salen bien. Entonces aparecen los apuros económicos para enfrentar el pago del adeudo, así como los intereses correspondientes.
Las entidades financieras clásicas, como los bancos, también cuentan con esquemas de préstamo para micro, pequeñas y medianas empresas. Ofrecen créditos que van de los 20 mil a los 3 millones de pesos.
Sin embargo, a diferencia de otras opciones de financiamiento a emprendedores, el banco siempre ganará, porque cobrará comisiones sobre el préstamo. Hará los cobros sin importar que tu empresa está ganando o perdiendo. Eso significa que aunque el emprendimiento haya fracasado, el deudor deberá pagar el monto solicitado.
Las alternativas que tienen los emprendedores para montar ese pequeño negocio con el que siempre han soñado son diversas, pero requieren que se tomen el tiempo de planear a dónde los solicitarán y cuánto tiempo les tomará recuperar lo invertido.
Cuando tenemos la idea de un negocio, lo más importante es planearlo bien. Hay que evitar pedir dinero, cuando no tenemos seguro el proyecto ni los recursos con los que contamos para materializarlo.
Los emprendedores deben tener claro qué problema están resolviendo con el negocio que quieren montar y cómo lograrán el retorno de la inversión. Si no lo tienes claro, será difícil que seas sujeto de crédito. En el peor escenario, aunque te presten el capital, si no tienes manera de recuperar la inversión, puedes terminar incluso en una situación de impago.
Si ya arriesgaste tus ahorros y te endeudaste por sacar adelante tu pequeño negocio, pero ya no puedes pagar a tus acreedores, entonces quizá es tiempo de que pienses en las opciones que tienes para recuperar las salud de tus finanzas.
Si ya estás en el Buró de Crédito y los despachos de cobranzas te atormentan para que hagas frente a tus compromisos financieros, pero en el negocio ya no sale ni para pagar a los empleados, entonces quizá es momento de acercarse con los expertos que te ayuden a salir de esa situación.
Las reparadoras de crédito con aliados para aquellos deudores que por una mala racha cayeron en Buró, pero quieren recuperarse como sujetos de crédito. Se trata de una empresa con especialistas en negociar con los acreedores.
Además diseñan para sus clientes planes de ahorro que permiten cubrir los montos adeudados ante las instituciones financieras. En la mayoría de los casos, los deudores no pueden cubrir el total del dinero que pidieron y los intereses que provocaron que dejara de pagar. Sin embargo, existe la negociación por “quita” que ofrece a ambas partes llegar a un acuerdo para saldar el adeudo si se cubre un porcentaje de lo adeudado.
Cada caso es diferente, así que lo mejor es que pidas una cita con un asesor para que revise tu situación y te proponga qué es lo mejor para que, de acuerdo a tus ingresos, puedas encontrar la mejor manera de planificar la manera para saldar tus deudas.
Nos interesa leerte, déjanos tus comentarios.